Nick Furia, agente de SHIELD.

Los fans de las series de superhéroes de la editora Marvel sin duda estarán familiarizados con este personaje, uno de los secundarios de lujo de las diversas franquicias de la casa. El Coronel Furia (traducción literal al castellano del apellido Fury del personaje en su edición original) aparece como el líder de una agencia gubernamental de inteligencia conocida como S.H.I.E.L.D. Un sujeto cascarrabias y autoritario que, dependiendo de la historia, bien puede aparecer dando apoyo logístico al superhéroe protagonista, o bien complicándole la vida como un Gran Hermano que sospecha hasta de su propia sombra. Los aficionados mas jóvenes probablemente lo identificaran con el aspecto de Samuel L. Jackson con el que fue reinterpretado en la colección Ultimates, y que es el actor que ahora le da vida en la gran pantalla, pero el personaje original, creado en tiempos de la Guerra Fría, era un hombre blanco, como exigían los prejuicios de la época. Lo que no ha cambiado es el parche en el ojo. Pero probablemente muchos aficionados desconocerán que el personaje dispuso de cabecera propia en los 60, una serie que es considerada como una de las más influyentes en el mundo del cómic, y que marco un antes y un después en el género de superhéroes: Nick Furia, agente de SHIELD.

Una de las míticas portadas de la serie.

El personaje del Coronel Furia fue creado inicialmente con el grado de sargento en 1963, para una serie de hazañas bélicas ambientada en la II Guerra Mundial. En ella aparecía como el clásico sargento rudo, pero carismático, al mando de un batallón de élite que hemos visto en tantas y tantas películas bélicas. El grupo de comandos que acompañan al Capitán América en la película de 2011 Capitán América el primer Vengador están basados en los personajes de esta serie. En 1965, al tiempo que seguían presentando sus aventuras bélicas como sargento, Marvel presentó al personaje en la actualidad (o más bien en ese futuro inmediato en que se desarrollan este tipo de historias), ya convertido en coronel (sin pasar por academia militar alguna, o como mínimo, sin especificarlo) al frente de una agencia gubernamental de contraespionaje llamada S.H.I.E.L.D. (Supreme Headquarters, International Espionage, Law-Enforcement Division en las primeras ediciones, aunque posteriormente se han usado otras denominaciones, o Sistema Homologado de Inteligencia, Espionaje, Logística, y Defensa en la versión en español). Nick Furia aparece con su nuevo rango por primera vez en el numero 135 de la colección Strange Tales, compartiendo número con otro superhéroe secundario de la editora, el Dr. Extraño, inicialmente a cargo del dúo Stan Lee - Jack Kirby. Por la serie pasaron diversos dibujantes, trabajando sobre los bocetos de Kirby, pero esta no despega definitivamente hasta que en el numero 151 de Strange Tales no se hace cargo de él un joven dibujante llamado Jim Steranko.

 Jim Steranko en una firma de ejemplares.

Jim Steranko es una de esas personas con una biografía digna de de alguno de sus personajes, un auténtico hombre del renacimiento de la cultura pop. Durante los años 50 se dedicó al mundo del espectáculo, bien como mago especializado en escapismo, bien como músico del naciente rock, llegando a actuar como telonero de la mítica banda Bill Haley and The Comets. A finales de la década se empieza a interesar por el mundo del dibujo, entrando en el mundo de la publicidad. Comienza en el mundo del cómic como entintador en 1957. En 1966, llama a la puerta de Marvel, donde le ponen a prueba encargándole el entintado del hoy mítico número 151 de Strange Tales dedicado a Nick Furia, abocetado por Jack Kirby. El resultado final fue tan impresionante que el joven Steranko quedó al cargo de la serie, primero como dibujante en solitario, prescindiendo de los bocetos de Kirby, y al poco incluso escribiendo también sus propios guiones. En junio 1968 el personaje se independiza de la colección Strange Tales para pasar a publicarse en su propia cabecera, Nick Furia, agente de S.H.I.EL.D. que se publico durante 15 números hasta noviembre de 1969.

Steranko dejó el mundo del cómic en esas fechas, en parte cansado de los encontronazos con la férrea censura de la época, para explorar otras ramas artísticas, como el cine (él diseñó la apariencia de Indiana Jones) y desde entonces solo ocasionalmente ha regresado al medio que le dio la fama. El personaje de Nick Furia volvió a su anterior condición de secundario habitual de las grandes series de Marvel, y aunque tanto a finales de los 80, cuando volvió a disfrutar de cabecera propia, como en diversas novelas gráficas, como la ya citada de la colección Ultimates en la que se basa la imagen de su versión cinematográfica actual (dicho sea de paso, el personaje ya dispuso de su propia película en 1998, encarnado por David Hasselhoff) se ha tratado de volver a convertirlo en protagonista principal de la historia, ninguna de ellas ha logrado eclipsar el mítico brillo de la primera serie de los años 60, en la que  Steranko rompió con todo lo establecido hasta entonces para explorar terrenos desconocidos.

Nick Furia contra Scorpio a doble página.

Steranko trajo el lenguaje visual del movimiento psicodélico, entonces en pleno apogeo, al mundo del cómic. Rompió la ordenación tradicional de las viñetas para acompañar mejor a la acción que se narraba. Si el personaje se encontraba en caída libre, Steranko obligaba a sus lectores a leer en espiral, a dar la vuelta a la revista para leer cabeza abajo, todo lo que hiciese falta para que la acción fuese siempre la que dominase. Introdujo panorámicas espectaculares, a doble página. Incluso en el numero 167 de Strange Tales se atrevió a dibujar una escena a cuádruple página, lo cual, en una época en que la fotocopia común era un costoso producto de alta tecnología solo accesible a profesionales de las artes gráficas, y la fotocopia en color directamente ciencia-ficción, obligaba a los aficionados a adquirir una segunda revista para colocarla junto a la primera si querían admirar la panorámica al completo, ya que no fue publicada como desplegable, sino como una revista común. Steranko también era un gran aficionado a las novelas y películas de James Bond, y quiso introducir ese escenario de autos lujosos y mujeres seductoras del superagente más famoso de todos los tiempos en su propia serie, lo que, como ya se ha comentado, le trajo más de un problema con la censura. A día de hoy, el trabajo de Steranko en Nick Furia, agente de S.H.I.EL.D. sigue siendo uno de los máximos exponentes de cómic de superheroes, una obra que ningún aficionado al género puede permitirse el lujo de desconocer.